Para visitar uno de los tesoros más maravillosos de Menorca, basta con hacer escala en algunas de sus calas. Sus 210 kilómetros de costa dan para mucho más que broncearse. Y es que cualquiera de ellas ofrece un rincón de inigualable belleza e incomparable tranquilidad. Todas son excepcionales opciones para el descanso y el relax. ¿Hacemos un tour y lo compruebas por ti mismo?
1. Cala Mitjana
Es esta una cala más larga que ancha y prácticamente virgen. Su fina arena blanca, sus aguas azul turquesa, sus acantilados de roca blanca y los frondosos pinares que la rodean ofrecen un paraje único que tienta a visitarla. Se encuentra al sur de la isla, donde se encontrará además multitud de alquileres de villas de lujo que harán que no quieras volver a casa.
Imagen: fotografiasdeciudad
2. Cala Galdana
Desde Cala Mitjana se puede acceder a Cala Galdana, otra de las más bonitas y representativas calas de Menorca. Se dice de ella que es la playa de los turistas, ya que tiene muchísima expectación. Pero es además muy familiar y cuenta con una gran zona de baño. En ella se puede encontrar todo tipo de servicios: bares, restaurantes, supermercados, etc., pero lo mejor es que pone a prueba tus ganas de diversión con la gran cantidad de actividades de ocio y entretenimiento que hay. Se pueden reservar barcas a motor, kayaks e incluso hacer parapente, entre otras.
Imagen: menocaenvelero
3. Cala Pregonda
Es una cala situada en Fornells que destaca por su carácter rebelde. Totalmente diferente a lo que puede verse al sur de la isla, la Cala Pregonda es especial, muy especial. Su arena es entre dorada y roja y en ella hay unos islotes que parecen protegerla de las olas. No hay servicios en sus alrededores y, aunque para llegar hay que hacer un recorrido de unos veinte minutos sin sombra, te aseguramos que el sitio vale la pena.
Cala Pregonda – MNK Villas
4. Cala Binidalí
De calitas más conocidas, extensas y animadas, nos vamos a otra más pequeñita y poco frecuentada, la Cala Binidalí, un auténtico regalo de la naturaleza. También de arena dorada y aguas cristalinas, esta cala se encuentra en la urbanización homónima cerca de Sant Climent, un núcleo rural que pertenece a Maó y que sin duda alguna es otro de los reclamos turísticos de Menorca que no debes olvidar conocer.
Imagen: menorcaok
5. Cala en Brut
Pequeña, pero con un encanto exclusivo. Así es Cala en Brut, un lugar en el que la arena no se deja ver. Para tomar el sol, hay más bien unas plataformas de roca pulida a modo de solariums en donde se puede descansar cómodamente. Se encuentra en Ciutadella.
Imagen: ca.wikipedia.org
Al ser una isla pequeña, los desplazamientos no llevan demasiado tiempo, así que si quieres alquilar una villa de lujo en Menorca, puedes escoger la que más te guste sin importar dónde esté ubicada.
Y a ti, ¿qué cala te gusta más?